La pandemia ha originado cambios en la relación de los pacientes con su médico. No era usual contar con servicios de consulta online o solicitar la medicación mediante una videollamada. Sin embargo, hoy en día ya es mucho más habitual realizar consultas virtuales sin necesidad de desplazamientos a centros médicos.
Este nuevo hábito es el resultado de una situación que ha impulsado la transformación digital del sector sanitario. En un sector tan complejo y de particular sensibilidad para los ciudadanos, la adopción de nuevas tecnologías debe realizarse en entornos IT muy seguros y con la infraestructura adecuada para sostener el crecimiento futuro de los servicios.
Paso 1: modernizar la infraestructura y los procesos
A pesar de los avances que ha traído la transformación digital, el sector sanitario continúa dependiendo de sistemas muy dispares y aplicaciones heterogéneas. Si la información no se puede intercambiar entre los distintos sistemas, los datos quedan aislados y el seguimiento de cada paciente entre diferentes centros, áreas y especialidades se vuelve complejo. Por ello es esencial agilizar procesos y modernizar la infraestructura existente para aumentar la eficiencia en la gestión de los servicios.
Esta transformación digital del sector obliga también a incorporar nuevas medidas de seguridad para gestionar los riesgos. Los datos de los pacientes deben encriptarse y los sistemas tienen que basarse en un enfoque zero trust para asegurar la identificación y autenticación de cada usuario y dispositivo. Es fundamental para el sector poder demostrar que está custodiando con rigurosidad los datos de los pacientes y que utiliza tecnologías que aumentan las garantías sobre la seguridad de la información.
La modernización de la infraestructura IT sanitaria requiere hoy contar con mayores recursos de centros de datos para la interconexión y almacenamiento de la información de los pacientes. Es imprescindible contar con una capacidad escalable de interconexión entre los centros donde se genera la información y las nubes públicas o privadas donde se almacenan los datos. La conectividad debe garantizar el transporte de un creciente volumen de datos con seguridad y baja latencia en tiempo real. Un diseño de arquitectura de red para contar con conexiones seguras y redundadas y con costes previsibles para volúmenes crecientes de datos es un requisito indispensable para los equipos que gestionan el IT de los sistemas sanitarios.

Paso 2: el impacto de una transformación basada en inteligencia artificial (IA)
Al alcanzar los objetivos de la primera fase de la transformación digital, se podrán incorporar tecnologías vanguardistas como la IA. Su uso en el análisis de los datos de pacientes tiene un impacto directo sobre la eficiencia operacional y trae mejoras considerables en el cuidado de los pacientes. En algunos países se están desarrollando proyectos de IA destinados a acelerar los diagnósticos clínicos de algunos tipos de cáncer. Con ello se puede incrementar la chance de supervivencia al iniciar antes los tratamientos y transformar así la calidad del cuidado al paciente.
Los procesos automatizados y la incorporación de la IA pueden ser factores clave para resolver situaciones de fuerte exigencia en el sistema sanitario, como ha ocurrido durante la reciente pandemia. La automatización de las tareas administrativas podría ayudar a liberar tiempo para atender mejor a los pacientes, simplificando procesos que actualmente requieren un tiempo excesivo en las consultas.
Por otra parte, el análisis de la información mediante herramientas de big data suma conocimiento muy valioso del que no se disponía con facilidad. Su aplicación en el sector sanitario traerá beneficios como:
- Una tasa menor de errores médicos: gracias al análisis de los registros de la historia clínica de los pacientes se podrán detectar discrepancias, evitando por ejemplo errores en la prescripción de medicaciones.
- Medicina preventiva: evitar las visitas recurrentes a las áreas de urgencia de los hospitales, identificando a aquellos pacientes que requieren un plan de asistencia preventiva para solucionar su situación sin necesidad de una asistencia de emergencia.
- Dotaciones de plantillas más precisas: el análisis predictivo de los datos anuales de ingresos de pacientes en hospitales es una forma rigurosa de determinar los requerimientos de personal sanitario. Es además una solución para reducir los tiempos de espera en salas de urgencias cuando una instalación tiene menos personal del requerido.

Más recursos para la atención al paciente
En ese camino de transformación digital que está recorriendo el sector de la salud, es además relevante su impacto en los presupuestos sanitarios. La automatización de los procesos y la aplicación de la IA aportarán ahorros significativos al liberar tiempo del personal médico y de enfermería. La automatización es indispensable teniendo en cuenta la escasez de recursos que sufren los sistemas de atención al usuario, y facilitaría la asignación del personal basada en el cuidado del paciente y no en requisitos de tareas administrativas. El desafío hoy es asegurar una implementación adecuada de la tecnología tanto para mejorar la atención del paciente como para optimizar los procesos de gestión sanitaria.